Las gotas que me corren sobre la frente tienen un sabor salado,no se sin son caricias del océano o trazos rojizos que salen del fuerte dolor de cabeza.
Siento las caricias frías de espuma que se mezclan con olor de madrugada,olor que no tiene recuerdos. Imagenes confusas que se ahogan y tratan de salir a flote en ese torbellino que es la mente. El cielo es uno con esta corriente de fantasmas, no se si estoy volando o flotando entres constelaciones de plancton que siguen las mareas.
Las extremidades son pedazos de témpanos que rehusan cualquier tipo de comunicación o estimulo al movimiento. Siento el suave vaivén de olas que se divierten conmigo cual juguete abandonado en medio de los elementos.
Trato de entablar un dialogo con mi cuerpo,monosílabos sordos de un idioma desconocido es el único sonido que escuchan mis oídos. Río,lloro,grito...
A lo lejos veo por un instante un destello rojo,como un guiño de un duende marino que se burla de mi. No se si creer o no en lo que veo, mis manos asumen el control de mi cuerpo y logran despertarlo haciendo que se mueva.
Me acompañan siluetas que se mueven siguiendo la trayectoria de un alma que se niega a volar dejándome en la nada. Las estrellas se asoman y siento comentarios: apuestan en el hecho si podrá ese minúsculo ser llegar a su destino. Trato de no escuchar. Río,lloro,grito...
El cuarto creciente las manda a callar, mientras que su fuerza me atrae hacia la ruta justa. Es casi una sonrisa dulce cubierta de sombras. De alguna manera mis piernas cambian, menos pesadas. Es como si Poseidon mismo me transformase en un tritón de su casta.
Percibo olores diferentes,sueño?olor de fuego antiguo,humo invisible,habano torcido...toco algo: arena. Mis dedos. Se escurren contra el fondo...grito,grito,grito!!!!!!
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